Anais abre los ojos, una extraña sensación de incomodidad e
inseguridad le recorre el cuerpo, ¿que hora es? Parece aun de noche,
decide levantarse e inspeccionar un poco la tienda.
Carlos y
Sofía duermen, qué mona Sofía durmiendo y que guapo Carlos, piensa Anais
mientras se sonroja. Pero, ¿y José?, ¿donde está José? Le entro el
pánico, lo busco por toda la tienda sin resultado alguno, y decidió
despertar a Carlos.
-Carlos, Carlos, - dijo susurrando Anais, -no
encuentro a José por ningún lado por favor despierta. Estaba a punto de
romper a llorar.
-¿Qué ocurre?, dijo Carlos frotándose los ojos y confuso
-Es José, no se donde esta.
Carlos se levantó casi de un salto al oír esas palabras.
-¿Cómo que no sabes donde esta José?
-No
se, me desperté y os vi a ti y a Sofía durmiendo pero no a José, lo he
buscado por todos lados y no esta Carlos no está... -Dijo Anais rompiendo a
llorar,
-Vale Anais tranquilízate, a lo mejor no has visto bien, -
le dijo Carlos mientras la abrazaba. Comenzaron a buscarlos por todos
lados pero no estaba en la tienda y no había señales de él.
-No es posible, ¿que ha pasado? ¿Escuchaste algo por eso te despertaste?
-No, nada de eso simplemente no se, tuve la sensación de que algo iba mal.
-vale, si no esta aquí dentro solo significa una cosa, ¡esta fuera!
-¿y
que hacemos? Con esta oscuridad no se ve mas de 2 metros de nuestra
cara, podríamos confundirlo con una de esas “cosas” y hacerle daño o
peor aun ser atacados.
No sabían que hacer, era muy
peligroso salir, pero que sería de José si estaba fuera y que hacía solo
por ahí, a Anais no le gustaba un pelo todo esto.
Sofía se despertó, se desperezaba y se frotaba los ojos mientras intentaba ver algo en aquella absoluta oscuridad.
-¿que pasa? -Preguntó.
-Nada cariño, tu sigue durmiendo. -Le dijo Carlos mientras le acariciaba la cara.
Que escena tan preciosa, se dijo Anais mientras los contemplaba.
Sofía
sin mucho rechistar se volvió a dormir. Carlos y Anais se sentaron en
la tienda pensativos y dudosos, tantas preguntas rondaban sus cabezas y
ninguna tenían respuestas. ¿donde estaba José?, ¿por qué había salido?,
¿volvería?
Justo en ese momento vieron una sombra acercarse a la
tienda, Anais cogió con fuerza la mano de Carlos mientras sin darse
cuenta estaba conteniendo la respiración. Carlos se puso delante para
protegerla.
La puerta de la tienda se abrió muy despacio, Carlos y Anais no dijeron nada, y en ese momento vieron que era José.
-¡José! ¿donde coño te metes a estas horas? - Le replico Carlos mientras soltaba la mano de Anais.
-Menudo susto nos has dado. -Dijo Anais
-Sois unos cobardes, no os asustéis tanto y dejarme tranquilo. -Dijo José ante la sorpresa de sus compañeros.
-¿Pero
tu que te crees? -Dijo Anais prácticamente gritando y abalanzandose
sobre él.
Carlos tubo que intervenir y agarrarla por la cintura.
-vamos,
vamos, tranquilicémonos, despertaremos a Sofía y todo esto tiene una
buena explicación, ¿verdad José? -Dijo Carlos mientras sostenía a Anais y
miraba desafiante a José.
-Puede, pero estoy cansado mañana si queréis podréis seguir con vuestro interrogatorio del tercer grado.
José se fue a dormir.
Carlos y Anais no salían de su asombro, no podían creer la reacción de José.
Anais se fijo en algo más, que la aterrorizó... José tenía las ropas manchada y mojadas, no estaba segura pero... era ¿sangre?
Anais miro a Carlos y pudo ver en sus ojos que pensaba lo mismo que ella.
-Ca...Carlos... ¿Te has fijado en...?
-bueno bueno, mejor vamos a dormir y no te preocupes, tendrá todo una explicación lógica.
@Anamitq
domingo, 16 de diciembre de 2012
Nada es igual. Capítulo 4
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Publicado por
Pilar Giralte (Aishabatgirl)
en
domingo, diciembre 16, 2012
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