jueves, 25 de octubre de 2012
Vidas extrañas
-Bienvenidos, esta noche en “Vidas extrañas” vamos a
descubrir la escalofriante historia del hombre sin nombre. Probablemente hayan
oído hablar de él, algunos le conocen como “Míster Alcantarilla” porque
precisamente es allí donde vive, pero no siempre fue así. ¿Pueden creerse que
hace años era el dueño de una próspera empresa, y que tenía una bella mujer? No
se pierdan todo esto y mucho más después de la publicidad.
***
-¿Cansado de conducir? Presentamos el nuevo coche New York,
con el sistema automatic drive, ahora sólo tendrás que indicar al piloto
automático a dónde vas y podrás tumbarte a descansar, leer el periódico o
navegar por internet despreocupándote de atascos, o del agotamiento típico de
los viajes. Deja que tu vehículo flote tranquilamente por la autopista
disfrutando de las nubes. Confía en Fly Cars, tu marca de siempre.
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-Hmm, parecía imposible que nuestros alimentos tuvieran más
sabor, pero una vez más hemos logrado que tomar una píldora de Viandac sea no
sólo nutritiva sino que estimule tus papilas gustativas haciéndote recordar
aquellas comidas deshidratadas en casa de tu abuela. Ahora en botes de veinte
pastillas, y comprando tres te regalamos un paquete del nuevo jarabe con sabor
a tiramisú.
***
-Seguimos con nuestro reportaje estrella de la noche, no se
lo pierdan. Es escalofriante la crudeza de la miseria humana, contactamos con
Marcia Smith. Marcia, te encuentras junto a nuestro protagonista, ¿verdad?
-Así es, estudio, me acompaña el anteriormente conocido como
Thomas Jeffrey, multimillonario y dueño de las principales empresas de la
ciudad tales como Viandac, Fly Cars o Travel to Saturn. Todo el mundo se
sorprendió con su desaparición e incluso se le había dado por muerto, pero este
programa, tras una minuciosa investigación, no sólo le ha encontrado sino que
hemos conseguido en exclusiva que nos narre su historia. Señor Jeffrey, ¿Qué
lleva a una persona que estaba en la cima a convertirse en un vagabundo que vive
entre basura?
-Le aseguro, señorita, que no es por gusto. Todo sucedió muy
rápido y aún me cuesta creerlo, pero es verídico. Legalmente ya no existo, no
tengo derecho a documento de identidad, ni a sanidad, ni tan siquiera a una
comida caliente en el albergue de la quinta avenida; no puedo acceder a mi
apartamento ni a mi oficina, mi mujer me invitó a una cena por nuestro
aniversario pero no lo supe a tiempo y me dejó creyendo que ya no la amaba, mi
vida es un infierno y no hay nadie que me pueda ayudar.
-Pero, ¿cuál es el motivo de toda esta mala fortuna?
-Verá, es simple, todo es por culpa de esta sociedad tan
saturada de tecnología, en la que todo ha de hacerse online.
-¿Por qué le echa la culpa de su mala fortuna a la
tecnología?
-Oh, es muy sencillo, no puedes ser nadie ni hacer nada sin
ella, por eso mi vida se hundió cuando se averió mi terminal informático
subcutáneo, haciendo que no hubiera forma humana de conectarme a la Super Red.
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Unknown
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jueves, octubre 25, 2012
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